
¿Qué es la angiodisplasia?
La angiodisplasia colónica es una alteración en los vasos sanguíneos de la mucosa del colon, que se vuelven frágiles, anómalos y propensos a sangrar. Suele afectar a personas mayores de 60 años y es una causa frecuente de sangrado digestivo bajo intermitente o crónico, muchas veces sin dolor.
Estas lesiones pueden ser únicas o múltiples, y se localizan con mayor frecuencia en el colon derecho (ciego y ascendente). Aunque no son cancerosas, su sangrado puede ser persistente y difícil de controlar sin tratamiento especializado.
¿Y la isquemia colónica?
La isquemia colónica ocurre cuando hay una reducción repentina del flujo sanguíneo en un segmento del colon, lo que provoca inflamación, úlceras y sangrado. Es más común en adultos mayores y en personas con enfermedades cardiovasculares, diabetes o episodios de hipotensión.
Ambas condiciones pueden confundirse clínicamente y se deben considerar dentro del diagnóstico diferencial del sangrado intestinal bajo.
Síntomas
Angiodisplasia:
- Sangrado rojo o vino tinto en las deposiciones.
- Anemia por pérdidas crónicas.
- Fatiga, palidez o mareo sin causa aparente.
- En algunos casos, sangrado masivo y súbito, sin dolor.
Isquemia colónica:
- Dolor abdominal de aparición súbita, especialmente en el lado izquierdo.
- Deposiciones con sangre o diarrea sanguinolenta.
- Fiebre leve y malestar general.
- Náuseas, vómito y sensibilidad abdominal.
- En casos graves, signos de peritonitis (abdomen rígido, dolor generalizado).
Diagnóstico
El diagnóstico suele requerir una combinación de estudios, entre ellos:
- Colonoscopia: visualiza lesiones vasculares o áreas de necrosis mucosa.
- Angiografía selectiva: útil si el sangrado es activo, permite localizar y tratar al mismo tiempo.
- TAC abdominal con contraste: útil en casos de isquemia o sangrado abundante.
- Pruebas de laboratorio: anemia, marcadores de inflamación.
Complicaciones si no se trata
- Anemia crónica que requiere transfusiones frecuentes.
- Sangrado masivo con riesgo vital.
- Isquemia transmural con necrosis del colon (requiere cirugía urgente).
- Riesgo de sepsis si hay perforación colónica por isquemia.
Tratamiento
Angiodisplasia:
- Coagulación endoscópica con argón o láser durante colonoscopia.
- Terapia angiográfica: embolización selectiva si hay sangrado activo.
- Medicamentos como octreótido en casos recurrentes.
- Cirugía en casos refractarios o con sangrado masivo.
Isquemia colónica:
- Hidratación intravenosa y soporte general.
- Antibióticos en casos de inflamación severa.
- Ayuno intestinal y monitoreo clínico.
- Cirugía si hay necrosis, perforación o peritonitis.
El manejo debe ser individualizado, especialmente en pacientes mayores o con múltiples comorbilidades.
Signos de alarma
Consulta de inmediato si presentas:
- Sangre fresca o coágulos en las heces.
- Fatiga intensa o palidez repentina.
- Dolor abdominal severo y progresivo.
- Fiebre con sangrado digestivo.
- Mareo, desmayo o debilidad sin explicación aparente.
Importancia de la valoración especializada
El sangrado digestivo bajo, aunque no siempre doloroso, puede tener causas graves que requieren un diagnóstico certero y tratamiento oportuno. Tanto la angiodisplasia como la isquemia colónica necesitan una evaluación experta, ya que pueden evolucionar rápidamente y poner en riesgo tu salud.